Este “solid surface” es un material cálido al tacto, similar a la piedra natural, que permite fabricar encimeras a medida que se adapten a sus necesidades.
Carencia de poros, no proliferación de las bacterias sin ningún tipo de aditivo, dureza, resistencia, durabilidad, facilidad de reparación, escaso mantenimiento y fácil limpieza son las principales características de este material.